martes, 14 de abril de 2020

Museo de las momias de Quinto.

El museo 



El museo está ubicado en una iglesia de comienzos del siglo XV atribuida al maestro Mahoma Ramí, arquitecto de Benedicto XIII (el Papa Luna), que ha experimentado ampliaciones y remodelaciones en épocas posteriores. En su advocación original estaba dedicada a Santa María, y posteriormente a la Asunción de la Virgen. Su ubicación en el Cerro de la Corona y su torre, han supuesto que popularmente sea conocida como iglesia de ”El Piquete”.

 


Durante la Guerra Civil española (1936-1939) sirvió de punto de observación, defensa, refugio de la población civil y de combate. Como consecuencia sufrió casi una total devastación, todavía se distinguen los impacto de bala y diferentes proyectiles en su interior. 



Especialmente dañada resultó la cara oeste de la torre. Tras la guerra, se optó por construir una nueva iglesia parroquial en la parte baja del pueblo.




Tras la desacralización de la iglesia tuvo varios usos. Principalmente fue utilizada como almacén de grano en los años sesenta y setenta.

En 1982 fue incoado expediente de declaración como monumento histórico artístico. A partir de 1983 se empezaron a llevar a cabo varias fases de actuación sobre la iglesia, iniciadas con la restauración estructural del edificio, la torre y su chapitel y las cubiertas. Desde ese momento, se han sucedido 13 fases de restauración que han contado con la colaboración de la Diputación Provincial de Zaragoza.

En 1996 el Ayuntamiento de Quinto de nuevo con el apoyo de la Diputación comenzó la renovación de las fachadas, según proyecto de los arquitectos Carlos García Toledo y Javier Peña Gonzalvo, concluyendo en 2003. Este largo proceso restaurador ha devuelto al exterior de la iglesia su estado original, no así del interior, pues no existe documentación anterior a la guerra civil y se ha optado en su consolidación y respetar en el que la ha dejado el paso del tiempo, incluidas inscripciones en las paredes de la época en que los niños de Quinto jugaban en su interior.

A partir de ese año, los trabajos se centran en el interior, actuando en el desescombro y limpieza de los ámbitos, restauración de ventanales interiores y suelo.

Los cuerpos descubiertos tras tres campañas de excavación arqueológica que comenzaron en el año 2011, pertenecen a mujeres y varones adultos, también a niños y niñas de corta edad y que se han mantenido intactos gracias a las especiales condiciones de humedad y temperatura que se da en esta antigua iglesia, convertida ahora en museo y en espacio sociocultural. 




El 1 de junio de 2018, Quinto abrió de nuevo el museo, tras la instalación en su interior de una exposición permanente de momias del s. XVIII y XIX que fueron exhumadas del suelo de la iglesia de la Asunción durante los trabajos de restauración.

Un total de quince cuerpos, además de vestimenta, zapatos, abalorios y objetos funerarios son expuestos tras años de intenso trabajo de conservación y musealización.

1.061 son las personas documentadas que fueron inhumadas en el suelo de esta antigua iglesia.

La ruta

Salí de Barcelona, pronto, sobre las 06:00 de la mañana, el plan era ir y volver en el mismo día. El museo abre a las 10:00. 



Tome la A2 en todo su recorrido. Parada técnica como siempre en la estación de servicio del Bruc, para revisar y reacomodar la mochila, sobredeposito, casco y continuar a buen ritmo. Parada a repostar en la gasolinera BP de Torre-Serona, carajillo rápido con un croissant, que la mañana esta fresca.

A partir de este punto, el asfalto del carril derecho de la A2 esta muy deteriorado por los trailers, hay que circular por él lo menos posible, y en caso de hacerlo ir por el centro, por donde esta marcada una linea negra en el asfalto, que es por donde no pisan las ruedas y gotea todo. Atentos también a las juntas de dilatación de los viaductos, no se pueden esquivar ni por el arcén, por lo que hay que ponerse un poco de pie sobre las estriberas y que el trallazo se lo lleve la amortiguación, que para eso esta, no vuestra columna vertebral. 


Un poco después de pasado Fraga, se convierte en carretera nacional NII buen asfalto, bien señalizada, se puede ir “muy ligero” eso si, continuamente adelantando camiones. Cuidado al adelantar y sobre todo con los que vienen de frente, son muy grandes, pero van mas rápido de lo que parece.

En este tramo es mejor no parar, porque por muy corta que sea la parada, (si vas en grupo se alarga más) los camiones adelantados, volverán a pasar delante tuyo y todo lo que has echo no habrá servido para nada.

Cuando te pones detrás de un trailer para rebasarlo hay una distancia en la que las turbulencias que ocasiona son muy molestas, te mueve la moto, el casco, poneros un par de metros mas cerca y desaparecen.

Cuando te vienen de frente, poneros a la derecha de vuestro carril, el aire que desplazan, cuando te cruzas con ellos, también es incomodo.

Llego a Bujaraloz mas o menos en el centro del pueblo hay un bar “La Parrilla” se almuerza bien y hay sitio para aparcar. 

Esta a la izquierda, hay que hacer una pequeña “pirula” o irte a la siguiente rotonda, si eres honrado, claro.

Después del opíparo almuerzo, ya no tuve hambre en todo el día, continué por la NII hasta el desvió dirección Gelsa A-1105 carretera de segundo orden en bastante mal estado por camiones y maquinaria agrícola. 



No puedo ir rápido, salvo por el centro, que esta un poco mejor. La sigo hasta cruzar el puente sobre el río Ebro. Después giro a la derecha dirección Quinto, A-221.




Atravieso el pueblo y casi a la salida hay un cartel a la izquierda que indica: Piscina Municipal / El Piquete. Es una calle en subida que cuando llego a la cima se convierte en tierra, son unos 400 m. En la parte baja del museo hay dos parquing habilitados.

Supongo que existirá un camino más cómodo para subir al museo, pero yo encontré este.

LA VISITA 



Cuando entre en el museo, estaba la conservadora atendiendo a una pareja de Barcelona, apunto de comenzar la visita guiada, después,de pagar la entrada, me uní.

Toda la explicación muy amena e interesante, respondía a todas las preguntas de forma clara y sencilla. Estuvo con nosotros mas de una hora, luego nos dejo dar una vuelta y hacer fotos, mientras cerraba el museo, que la hora son las 13:00 y eran ya casi las 13:15

No voy a contar todo, tenéis que visitarlo:

En España hasta mediados del siglo XIX los zapatos no tenían horma, servían indistintamente para el pie derecho o izquierdo. Los adultos hacían marcas para ponerse siempre igual los zapatos, y que fueran acomodándose al pie. A los niños les ponían cordones de distintos colores en cada uno, para distinguirlos. La momia de un niño de unos 10 años, los lleva al revés, quien lo vistió para el funeral, se los puso mal. 




Hay una chica de unos 35 años que murió de una obstrucción intestinal, al escanear los forenses el cuerpo, vieron que todavía tenía heces en el intestino, tomaron una muestra y encontraron semillas de uva, que ahora están en el Real Jardín Botánico de Madrid, donde están intentando hacerlas germinar para averiguar que tipo de uva se cultivaba en la zona hace 200 años.

El museo es pequeño, hay quince momias expuestas, y otras tantas en proceso de estudio y restauración, cada una con su historia documentada. 

Lo que sí quiero decir, que es una pena que los políticos en general y al Ministerio de Cultura, no se preocupen de estos pequeños y curiosos museos que hay por toda España. Que tienen que hacer malabarismos para mantenerse y gracias a los vecinos de la población a la que pertenecen que dedican su tiempo y su dinero para mantenerlos.

Personalmente me gusto mucho. https://momiasdequinto.es/ 




lunes, 10 de febrero de 2020

La epidemia de Barcelona, 1821.

Fiebre amarilla importada del Caribe.

Barcelona, ​​sufrió una epidemia de fiebre amarilla que acabó con la vida  de entre 18.000 y 20.000 barceloneses, cuando su población era de unas 100.000 personas durante el verano y otoño de 1821. Se trata de una enfermedad viral procedente de zonas cálidas, que se transmite por la picadura del mosquito "aedes aegypti", en aquella época era conocida como el vómito negro, o la plaga americana. Barcelona se había expuesto a ella por culpa de la apertura del comercio y el tráfico de esclavos con las Antillas.

Aedes aegypti

El 17 de julio de 1821 entró en el puerto de Barcelona un bergantín llamado Gran Turco. Formaba parte de una flota de 52 barcos que había estado navegando por el Mar Caribe: Las Antillas, Cuba, desde allí había puesto rumbo a Barcelona, haciendo escala en Málaga.
Había perdido a varios de sus marineros durante la travesía; y fue al fondear en Barcelona, donde los calafates que subieron a hacerle reparaciones enfermaron, muriendo poco después. La enfermedad comienza a manifestarse entre tres y seis días después del contagio.

El 3 de agosto, la Junta de Sanidad reconoció que se habían producido fallecimientos misteriosos en la Barceloneta. Oficialmente sólo había cuatro muertos, y otras 10 personas estaban en estado muy grave.

Esta concentración de la enfermedad en una zona pobre llevó a tildar de negligencia, por parte de algunas autoridades locales y cruces de acusaciones entre políticos, además de división de opiniones entre los médicos de la época, unos defensores del origen tropical de la epidemia, y otros que creían que se debía a la suciedad del puerto. Aparecieron rumores de la existencia de pozos envenenados o de la distribución de alimentos contaminados.

Esta plaga era difícil de diagnosticar. Se sabía poco de ella y se confundía con males endémicos, como el tifus y las calenturas de la ictericia. De hecho, el primer nombre que se le dio fue el de tifus o calentura amarilla.

El número de muertes siguió aumentando hasta agosto. Se produjo un éxodo de la mayor parte de los ciudadanos más ricos, el alcalde Josep Marià de Cabanes i Escofet, decidió quedarse. A los médicos y farmacéuticos se les ordenó permanecer, mientras policías y 3000 milicianos, la mitad de los cuales murieron heroicamente tratando de evitar disturbios y saqueos. Ante el hecho de que una importante epidemia de la enfermedad se había extendido por toda la ciudad, con de personas muriendo cada día, las autoridades cerraron los accesos de entrada y salida de Barcelona, estableciendo una cuarentena.
A finales de agosto había cientos muertos y se abría un hospital en el palacio de la Virreina, en Gracia.

El Palacio de la Virreina, que podemos ver en las Ramblas de Barcelona, era gemelo de otro palacio, situado en el barrio de Gracia, entonces a las afueras de la ciudad; ambos fueron construidos por el mismo propietario, el Virrey Amat, en las postrimerías del siglo XVIII. La Gran Torre de Gracia fue empleada como hospital en varias ocasiones.
Palacio de la Virreina, Gracia
Se habilitaron dos hospitales más, el de La Santa Creu, en la calle Hospital y el de el Convento de Jesús, que se encontraba en lo que hoy es el Barrio de Gracia.
Como dicen los abuelos: "antes, todo esto eran campos"

Situación del Convento de Jesús.

Francia movilizó tropas, médicos y enfermeros, que llegaron el 8 de octubre a investigar la enfermedad. El hospital de Gracia, situada estratégicamente en las afueras de Barcelona, permitía someter a observación y revisión personas que, por el hecho de haber estado en contacto con personas infectadas, eran consideradas probable foco de infección, antes de dejarlas circular libremente por la zona no contaminada.

El doctor Mazet atiende a personas que sufren de fiebre amarilla en las calles de Barcelona. André Mazet (diciembre de 1793 - 22 de octubre de 1821) fue un médico francés. Su libro, "Observations sur la Fievre Jaune, Faites a Cadix, en 1819 " fue un relato de un brote de fiebre amarilla en Cádiz. Mazet fue uno de los cinco miembros de la comisión médica enviada a Barcelona por el gobierno francés para combatir la epidemia. Llegó a Barcelona el 8 de octubre y fue infectado casi de inmediato, murió el día 22 del mismo mes. 

Doctor Mazet en Barcelona, según litografia de la época.

¿Cómo se contagia?
El contagio sólo se produce por la picadura de mosquitos infectados. No se contagia a través del contacto personal, objetos, ni por la leche materna. Si bien cualquier persona puede contraer la fiebre amarilla, las personas mayores y los niños corren mayor riesgo.Una vez superada se queda inmunizado de por vida 
La escasez de alimentos y de agua potable agravó la situación. Francia estableció un cordón de seguridad con 15000 soldados para prevenir que los refugiados cruzaran los Pirineos. Otras medidas adoptadas incluyeron el cierre de sus puertos a los buques catalanes o poner en cuarentena a todos los buques españoles. Madrid también tomó medidas mediante el control de sus puntos de acceso identificando a los ciudadanos catalanes que entraran en la ciudad. Hasta se suspendieron las corridas de toros.
También se hundieron los barcos sospechosos de estar contaminados a principios de septiembre.

En octubre ya se registraban 200 fallecimientos diarios. En Montjuïc, se organizó el Campamento Sanitario de la Constitución  para 4.000 personas ( sin síntomas de la enfermedad).

Campamento Sanitario de la Constitución

Sants y Hostafrancs se llenaron de barracas, con supervivientes que habían huido de sus domicilios y que vivían como indigentes.

El contagio no remitió hasta finales de noviembre, y la cuarentena aún se prolongó hasta el mes de diciembre de ese año. En ese lapso de tiempo hubo 6.244 víctimas. Deshabitó los barrios cercanos al mar e hizo que el cementerio de Pueblo Nuevo se llenase de tumbas. Fue tal el pánico que provocó, que vinieron comisiones científicas de todos los países de Europa, forzando a cambiar las leyes sanitarias.

En noviembre, la epidemia fue disminuyendo su intensidad, y con el inicio del frío de diciembre finalmente cesó por completo. El puerto de Barcelona se reabrió el día de Navidad. Se estima que entre 18.000 y 20.000 personas murieron en Barcelona de fiebre amarilla entre agosto y diciembre de 1821, sobre una población de unos 100.000 habitantes. afectando de una forma u otra a 1 de cada 4 barceloneses. Otro lugares cercanos de la región también resultaron severamente afectados, incluyendo Tortosa , Tarragona y o las islas Baleares.
Fue tal el pánico que provocó, que vinieron comisiones científicas de todos los países de Europa, forzando a cambiar las leyes sanitarias.

Monumento conmemorativo en el Cementerio de Pueblo Nuevo.

El monumento fue erigido en 1823 por Antonio Ginesi en estilo neoclásico, y reformado después por Leandre Albareda en 1895. Está inspirado en los  templetes romanos, está compuesto de columnas y coronas de laurel en bronce. Y presenta en sus cuatro lados sendas lápidas aclaratorias, que recuerdan a los doctores que lucharon contra la enfermedad, y a los alcaldes y regidores constitucionales que -fieles a su juramento, "siguieron en sus puestos hasta contagiarse y morir". Sobre este conjunto se eleva una columna coronada por una cruz.







Ahora sólo queda este templete, como recuerdo a las víctimas.
















lunes, 3 de febrero de 2020

El dia que un avion se estrello en Las Ramblas

Los hechos acaecidos.

El domingo 30 de septiembre de 1934 a las tres y media de la tarde salió del Hospital Militar el entierro del teniente aviador Don Eduardo Dalias Charte, cuyo cadáver había sido traído desde León, donde el teniente sufrió un accidente de aviación durante unas maniobras militares.

Sobre las dos y media de la tarde, despegaron del Aeródromo del Prat cinco biplanos Breguet para según la prensa de la época "...tributar los correspondientes honores al malogrado compañero Sr.Dalias"



ESPECIFICACIONES TÉCNICAS
Tripulación: Dos, piloto y observador.
Longitud: 8,87 m (29 ft 1 in)
Envergadura: 14,36 m (47 ft 1 in)
Altura: 3,30 m (10 ft 10 in)
Área del ala: 47,50 m² (511 ft2)
Peso vacío: 1.010 kg (2.227 lb)
Máximo peso de despegue: 1.536 kg (3.386 lb)
Motor: 1 x Renault 12 F, de 224 kW (300 hp) 
Prestaciones
Velocidad máxima: 175 km/h (109 mph, 95 nudos).
Rango: 900 km (486 millas náuticas, 560 millas
Techo operativo: 6.000 m (19.685 ft)
Rango de ascenso: 292 m/s (960 ft/min)
Carga del ala: 32 kg/m² (6,6 lb/ft2)
Fuerza/Masa: 0,14 W/kg (0,09 lb/hp) 
Armamento 
1 x Ametralladora Vickers fija de 0.303 in (7,7 mm)
2 x Ametralladora Lewis móvil de 0.303 in (7,7 mm) operada por el observador.
300 kg (660 lb) en bombas.
Los aparatos evolucionaron sobre la ciudad, y uno de ellos, el 12-97, pilotado por el subteniente D. Rufino Núñez y el cabo mecánico Adolfo Madariaga, sufrió una panne (parada repentina de un vehículo a motor) El motor empezó a perder gasolina y finalmente se paró. El piloto, a fin de evitar estrellarse contra la multitud, que abarrotaba la plaza Catalunya, intentó sin suerte, alcanzar las aguas del puerto para realizar allí un aterrizaje forzoso que amortiguase el inevitable impacto.
Finalmente el aparato perdiendo altura descendió sobre Las Ramblas, una de las alas tocó una antena, y el aparato fué a caer encima de unos árboles de la rambla de Santa Mónica, frente a la iglesia del mismo nombre.


El hecho de haber caído sobre unos árboles ha evitado una catástrofe, aunque resultaron gravemente heridos los dos tripulantes del avión y un transeúnte.
Con el impacto perdió un ala y volcó inevitablemente. Las alas y la cabina primero y más tarde el motor se incendiaron.
Al poco del accidente acudieron raudos lo bomberos al mando del sr.Jordán, quienes procedieron con gran rapidez a sofocar el incendio, que iba consumiendo el aparato.


Los transeúntes, alertados gracias a las hábiles maniobras del piloto, acudieron raudos a prestar auxilio a los tripulantes que habían resultado gravemente heridos. Ambos fueron trasladados en taxi rápidamente a centros sanitarios.


Como consecuencia del accidente el subteniente D. Rufino Núñez de 35 años, natural de La Coruña, sufrió una grave conmoción cerebral y fracturas en ambas piernas. Por su parte el mecánico militar, Adolfo Madariaga de 25 años resultó menos favorecido comunicándose a la prensa que su pronóstico era de mayor gravedad, también conmoción cerebral y fractura de la columna vertebral. Ambos fueron conducidos al Hospital Militar.
Acudió al lugar del accidente la Guardia Civil, del cuartel de la Rambla del Centro.
Un transeúnte resultó también herido al rozarle un ala durante la caída, Carlos Tallada, de 35 años, natural de Tortosa y empleado de la Caja de Ahorros, pero sus heridas no revestían gravedad.

Una sección del ejército del aire acudió también con presteza, para guardar los restos del aparato hasta que las autoridades militar y jurídica hubiesen instruido las primeras diligencias.
A las cinco y cuarto mecánicos de la aviación militar procedieron a retirar los restos del avión y cargarlo en dos camiones, en lo cual emplearon una hora y media ya que quedo todo terminado a las siete y cuarto.

El sepelio del teniente Eduardo Dalias Charte, continuo sin complicaciones

Este accidente provocó una honda emoción en la ciudad. Finalmente los heridos se recuperaron.





jueves, 30 de enero de 2020

El campo de concentración de Horta

Este articulo, esta dedicado a Neus Pampalona, que a raíz de la publicación de -el revolt de les monges- me dijo: ahora tienes que hacer uno del otro bando” pues bien, como escribió Bécquer: “Sea de ello lo que quiera, ahí va, como el caballo de copas”.

Campo de concentración de Horta, febrero de 1938 - abril de 1940.

La historia comienza en 1928 cuando la Casa de la Caridad de Barcelona, tuvo la necesidad de construir unas nuevas instalaciones, al quedarse pequeño el edificio de la calle Montalegre, donde ahora se encuentra el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona que albergaba a unas dos mil almas entre niños y niñas, huérfanos o en riesgo de exclusión social.
Se encargó al arquitecto  Joan Rubió i Bellver, discípulo de Antonio Gaudi  desarrollar el proyecto que consistía en tres edificios dentro del complejo que se llamaría Beato Salvador los edificios Poniente, con capacidad para 750 niños Central donde se encontraría la administración, sala de actos, almacenes y servicios y Levante donde se alojarán 750 niñas.
La empresa de construcción contratada fue; Construcciones Bofill SA.

Joan Rubió i Bellver
Maqueta de 1929 del complejo Beato salvador
Con el estallido de la guerra civil, se paralizaron las obras que llevaban mucho retraso por diferentes motivos, solo el edificio “Levante” estaba prácticamente acabado, ya había sido utilizado por el ejército republicano con el nombre de “Caserna Francesc Macia” después de los bombardeos de Barcelona en marzo de 1938 por la Aviación Legionaria Italiana con base en Mallorca, el edificio de “Poniente” paso a ser depósito de combustible de CAMPSA.

La caída de Barcelona

Los organismos oficiales de la República y la Generalitat habían sido evacuados el día 22, mientras los restos del Ejército Republicano intentaban defender la línea del río Llobregat atacada por el Cuerpo de Ejército Marroquí,mandado por el general Yagüe.
El 24 de enero, el CTV (Corpo Truppe Volontarie) de Gastone Gambara atacó por Martorell, el de Navarra por Molins de Rey y el Marroquí por El Prat, para en un movimiento envolvente, rodear Barcelona.
La vanguardia estaba formada por la 105 División Marroquí, mandada por el general Barrón, y las Divisiones Navarras 4ª, 5ª –que entró por San Pedro Mártir y Vallvidrera hacia las 10 de la mañana– y la 12ª, mandadas por los generales Juan Bautista Sánchez González, Camilo Alonso Vega y José Asensio Cabanillas, respectivamente.
A lo largo del 25 de enero las fuerzas de la 105.ª División del coronel Natalio López Bravo ocuparon el Aeródromo del Prat.


Tropas Nacionales en Esplugues de Llobregat, Panzer I y T-26 capturado al ejército Republicano
Al amanecer del 26 de enero las tropas franquistas toman  las cumbres del Tibidabo y de Montjuic, al mediodía entraron en Barcelona. Tanquetas y Regulares marroquíes se adentraron por las calles de Sarrià y llegaban al Paseo de Gràcia. Después el grueso de las tropas de los generales Solchaga y Yagüe entran sin resistencia en la ciudad, bajaron hasta  la plaza Catalunya, las Ramblas y la plaza Sant Jaume. En paralelo, la "quinta columna" franquista hizo su aparición en las calles barcelonesas tras dos años y medio en la clandestinidad.
A las cuatro y media de la tarde, el capitán de la Legión, Víctor Felipe Martínez, tomó posesión de la Generalitat y el Ayuntamiento.
Hacia las cinco de la tarde, el general Juan Yagüe, Dionisio Ridruejo, jefe de Propaganda y otros mandos de la vanguardia franquista estaban en la Plaza de Catalunya, rodeados por las tropas y civiles.

Plaza Cataluña

Franco nombró al general Eladio Álvarez Arenas jefe supremo de los servicios de ocupación. Cuando llegó a Barcelona, al día siguiente de la entrada de las tropas, emitió un bando que no dejó lugar a dudas. Tras una introducción benévola y cordial “Estad seguros, catalanes, de que vuestro lenguaje, en el uso privado y familiar, no será perseguido; de que vuestras costumbres y tradiciones, hallarán en el nuevo régimen los más calurosos asensos (consentimientos)”.
Le siguieron veintidós artículos en los que mostraba su poder absoluto: estado de guerra; prohibición de partidos políticos (excepto la Falange), de reuniones y manifestaciones; juicios sumarísimos, depuración de funcionarios y medidas logísticas y económicas que ponían bajo su autoridad los escasos recursos que quedaban en la ciudad.

General Eladio Álvarez Arenas.
Las tropas de ocupación buscaron un lugar apartado pero bien comunicado y con suministro de agua para implantar un campo de concentración. Después de un mínimo acondicionamiento, colocación de alambradas, garitas de vigilancia, comenzó a funcionar como campo de prisioneros en febrero.
Las condiciones del edificio no eran ni más ni menos las mejores, una construcción enorme a medio terminar, al que faltaba incluso letrinas, los presos tenían que cavar zanjas fuera del edificio para ese fin. En invierno, las corrientes de aire y el frió era continuos.
Los prisioneros dormían en el suelo con una manta.La mayoría de las ventanas no tenían cristales, eso cuando estaba la ventana.
Las pocas duchas de agua fría facilitaban un mínimo de aseo personal, pero solo funcionaban de tanto en tanto. La comida era escasa y mala, consistía en pan de munición y latas de sardinas, que tenían que abrir como pudiesen, ya que se les retiraba la llave al poder ser utilizada como arma.


El pan de munición era un pan de corteza dura y miga blanda, amasado con mezcla de arina de trigo y centeno en panes redondos de 500gr, pero se ahorraban ingredientes para llegar al peso utilizando arina sin refinar, arena y pan duro molido.
Dibujo de un preso, sobre la vida en el interior del campo.

Carta de un preso (extracto)
Estimada María: Vivo en una habitación con quince o veinte jóvenes que cuatro meses antes eran valientes soldados y hoy prisioneros de guerra. Entonces sus manos empuñaban un fusil y del cinto pendían bombas mortíferas, ahora aquellas manos son útiles para lavarse, afeitarse i matar piojos y de su cinto no cuelga sino ropa sucia llena de parásitos.En la explanada del campo una inmensa muchedumbre privada de libertad, acababa la santa misa y entre aquella un hombre seguía como automatizado sus gestos y movimientos. No ponía atención en el acto religioso que estaba celebrando ni pensaba en las personas que tenia el deber de amar y vivir por ellas. Absorto, el dolor y la alegría poco reflejo en su corazón obtenían, el recuerdo y la filosofía de años y años pasados que por ser de la juventud hubiesen tenido que ser los más hermosos de su vida, le habían convertido en inmune.
La comunicación de los presos con sus familiares, era a gritos desde una distancia segura de la alambrada. Otro sistema era conseguir un trozo de papel y algo con lo que escribir, atar el papel a una piedra y tirarlo fuera del campo, con la esperanza que alguien lo encontrara y lo llevara hasta el destinatario
Familiares de presos, cerca del campo
Se hizo cargo del campo El Cuerpo del ejército de Navarra, pasando luego a la “Dirección General de inspección de campos de concentración de prisioneros” que tenía las oficinas en la avd. Diagonal 538, pral, allí se gestionaban todos los campos y prisioneros de Cataluña.

Avd Diagonal 538, pral.
Al mando del campo estaba el Capitán Saturnino de la Torre. En febrero, el edificio de levante de unos 23.000 m2 ya estaba saturado de presos unos 6.000, de todas las partes de España, en Barcelona había más campos de prisioneros, La Cárcel Modelo, el Castillo de Montjüic, la Fábrica de Cáñamo en Pueblo Nuevo, Y las dos antiguas Checas de la izquierda: El Palacio de las Misiones, que era un pabellón de la Feria Internacional de 1929 y el convento de las Clarisas en la calle San Elias. Las mujeres eran llevadas a la cárcel de mujeres de las Corts.

Edificio Levante, donde estaban recluidos los presos.
Se organizaron batallones de trabajo que estaban controlados por “La dirección general de regiones devastadas y reparaciones”  a la que las empresas solicitaban mano de obra por un módico precio y tenían mano de obra asegurada 24 h, 7 días a la semana.
El jornal diario que pagaban las empresas era de 14 pts (8 cént.) de lo que solo 50 céntimos de peseta (no es ni un céntimo de euro) era para el preso.
3 pts (2 cent.) iban para la familia del preso.
1,40 pts (1 cent) eran retenidas, en teoría para su alimentación
9,10 pts (5 cents) restantes iban a parar a Hacienda. Este dinero era periódicamente ingresado por el “Patronato para la Redención de Penas”en una cta cifrada del Banco de España a nombre del entonces subsecretario de presidencia del Gobierno. Luis Carrero Blanco.
Estos batallones realizaron trabajos como:
Recogida de chatarra para la “Comisión Provincial para la recogida de Chatarra de Barcelona” que tenía sus oficinas en Via Layetana 32 /34 Entresuelo.

Vía Layetana 32/34 Entresuelo.
Estaba prohibido la compra y venta de chatarra entre particulares, cualquier trozo de metal que se encontrara en la vía pública podía ser requisado.
Las empresas, talleres que necesitaran material tenían que solicitarlo a la comisión y supongo que pagarlo, claro...aunque no he encontrado ningún dato sobre esto.
Recuperación de material de guerra: En la estación de La Sagrera, se estableció un centro de desactivación de proyectiles. No se sabe a ciencia cierta cuántos presos murieron desactivando explosivos
Nota personal.
Mi abuelo era oficial médico destinado al Parque de Artillería de Sant Andreu, contaba historias de esta época, de las veces que había tenido que salir corriendo a la Sagrera o a Montcada, donde había otro centro de desactivación, por que había explotado un proyectil. Como es normal, pocas veces podían hacer "algo", si a alguien le había estallado a un palmo de la cara.

Se formaron batallones que fueron trasladados a Gerona para la construcción de las fortificaciones de la Línea del Pirineo.
Otros presos fueron enviados a Zaragoza para la reconstrucción del Aeródromo Sanjurjo.
La reconstrucción de Iglesias, puentes, carreteras, la reparación de infraestructuras  se encargaba a empresas privadas, pero con mano de obra esclava, un negocio redondo.

Algunas empresas que se benificiarón de la mano de obra esclava fueron:
Dragados y Construcciones (ACS)
Entrecanales (Acciona)
Infraestructuras Ferroviarias (ADIF)
J. Huarte (OHL)
Un inciso, ahora que estamos con este tema....
En 1999 se condenó a las empresas alemanas que utilizaron mano de obra esclava, a pagar  indemnizaciones a medias con el Gobierno, en total 12.000 millones de euros a los 600,000 personas que estuvieron esclavizadas. Gracias al “Programa Alemán de Indemnización por Trabajos Forzados” (GFLCP) y a la Fundación Memoria, responsabilidad y Futuro
Un ejemplo...
IG Farben (Bayer) fabricaba el ZyclonB, un pesticida con base de cianuro utilizado para gasear
Siemens. Que fabricó las instalaciones para las cámaras de gas.
Allianz. Aseguro el personal y las instalaciones de Auswitchz, entre otros campos
IBM. (filial alemana).Ideó un sistema de clasificación mediante tarjetas perforadas para los judíos alemanes.
Y otras 250 empresas más... Wolkswagen, BMW, Ford (por su división alemana).

También hubo fugas.

Sucedió en Francia al final de la guerra. Salvador Gómez, fue internado en el Campo de Vernet,de donde escapó y con el, Clot compañero de FIJL (Federación Ibérica de Juventudes Libertarias) y Juan José Delgado Baeza decidieron regresar España para continuar la lucha y liberar a su hermano Rafael preso en el campo de concentración  Horta.
Todo se preparó en un piso del barrio de Horta. Contactaron con un impresor de la calle del Carmen, Mario Marcelo Goyeneche, otro de los colaboradores del grupo fué el grabador Manuel Bent Beltrán que falsifico los sellos y cuños de la Jefatura de Falange Española del Distrito IX, del campo de concentración de Horta y de la Guardia Civil.
Confeccionaron listas falsas de presos que tenían que ser trasladados a la cárcel Modelo
Con estos documentos y con uniformes de la Guardia Civil  pudieron liberar a Rafael Gómez Talón.
Decenas de presos se liberarán con este método hasta que la operación es descubierta por las autoridades y se produce un enfrentamiento en el que muere el soldado de infantería  José López Hernández y herido grave el sargento Antonio López Garrido.
Posteriormente, el grupo cambió de táctica y atacaba los camiones militares durante los traslados a la cárcel Modelo.
Así se liberaron en la calle Pedro IV a diez condenados a muerte que iban a ser fusilados en el campo Bota,
Tras la detención a principios de septiembre de uno de los miembros del grupo, la Guardia Civil, asaltó la casa que servía de refugio en Horta. Numerosas armas y munición fueron incautadas también en el n º 83 de la calle Cerdeña. Fueron detenidos en ese momento y en días posteriores:
Salvador Gomez.
Rafael Gómez,Juan.
Baeza Delgado.
José Tarín Marchuet.
Fulgencio Rosaledo Martínez.
Juan Hernando Tarrazón.
Pascual López Laguarta.
Genaro Solsona Ronda.
Mario Marcelino Goyeneche.
Manuel Beltrán Benet.
Rafael Valverde Cerdán.
Alfonso González Martí.
Juan Mena Pallarés.
Pilar López Xipres.
Dolores Tarín Marchuet.
Anita López López Heredia.
Donato Sánchez.
José Gómez Bujes.
Magdalena Farrés Cortina.
Rafael Giménez Otal.
Acusados de la liberación de varios presos y robo a mano armada, todos fueron llevados ante un consejo de guerra, que se reunió el 9 de diciembre.
Condenado a muerte Salvador Gómez fue fusilado en el Campo de la Bota 12 de septiembre 1939 con su hermano Rafael, Fulgencio Rosaledo Martínez, José Tarín Marchuet, Juan Baeza Delgado y Juan Mena Pallares
En el mismo consejo de guerra, Pascual López Laguarta, Rafael Giménez Otal y Rafael Valverde Cerdán fueron condenados a veinte años, y Alfonso González Martí a treinta años de prisión.
El resto salió en libertad.

El capitán general Luis Orgaz Yoldi, Jefe de los Servicios de Ocupación, ordenaba la clausura del campo, la dispersión de sus reclusos y su definitiva "clasificación en función de sus responsabilidades" y enviados a los campos de Reus y Figueras.

General Luis Orgaz Yoldi
Fue capitán general de Cataluña de 1939 a 1941, donde firma numerosas sentencias de muerte en Barcelona ciudad a detenidos de diversa índole, así como a militares fieles a la República, que se ejecutan en el Campo de la Bota.
En 2008 fue imputado por crímenes contra la humanidad y detención ilegal. Fue uno de los treinta y cinco altos cargos del franquismo imputados por la Audiencia Nacional en el sumario instruido por Baltasar Garzón por los presuntos delitos de detención ilegal y crímenes contra la humanidad que supuestamente habrían sido cometidos durante la Guerra Civil y los primeros años del régimen de Franco. El juez declaró extinguida la responsabilidad criminal de Orgaz cuando recibió constancia fehaciente de su fallecimiento, acaecido más de cincuenta años antes.​ 
De marzo a abril de 1940, 122 prisioneros de la 4 compañía del batallón 140 de trabajadores, vigilados por siete soldados, un cabo, un alférez y un teniente, desmantelaron el campo.
Los edificios fueron devueltos a la Casa de la Caridad, que ahora dependía de la Diputación de Barcelona.



Se reiniciaron las obras que terminaron en 1942. La Casa de la Caridad reconocía en 1952 “que eran unos edificios mastodonicos e inapropiados a medio terminar, unos edificios inhabitables.
entre 1942 y 1945 el recinto acogió un albergue de mendigos y uno de tuberculosos.
En 1954, el presidente de la Diputación de Barcelona se lamentaba de la necesidad de remodelación de la Casa de Caridad de la ciudad, que había quedado obsoleta, y reflexionaba sobre las dificultades para la construcción de un nuevo recinto.
El empresario Artur Mundet se hizo eco de esta demanda y, desde México, se puso en contacto con la institución para ofrecer una donación de un millón de dólares, 40 millones de pesetas de la época, para el estudio y construcción de unas nuevas instalaciones en la Vall d’Hebron. Gracias a su patrocinio, la Casa de la Caridad de Barcelona, también conocida como Hogares Anna Gironella de Mundet, se inauguró el 14 de octubre de 1957 por el general Franco.


El encargado de realizar el estudio sobre el terreno fue el arquitecto Baldrich, que contaba con la filosofía de equilibrio entre la naturaleza y el espacio urbanizado.
Baldrich dio un aire de modernidad al conjunto de edificios, motivo por el cual estos formaron parte de “la renovación arquitectónica y urbanística catalana de mediados del siglo XX” (TRIBÓ, 2008: 124). La construcción de las Llars Mundet empezó el día 9 de septiembre de 1954 y fueron inauguradas el 14 de octubre de 1957 por el General Francisco Franco.
Con el paso del tiempo, se fueron añadiendo nuevas instalaciones en las Llars Mundet y se cambiaron las funciones de las antiguas. Asimismo, se incorporaron las escuelas de educación primaria, secundaria y los estudios de formación profesional; se construyeron nuevas edificaciones, que se destinaron a la residencia de los niños y niñas de los trabajadores; y, por último, se añadieron instalaciones deportivas.


Aunque en un principio se construyeron las Llars Mundet para dar una mejor educación y vida a quienes lo necesitaban, no resultó ser así. En las Llars se sufrían muchos maltratos y abusos sexuales, entre otros (TV3, Els internats de la por) Es por eso que cada vez se cuestionaba más su funcionamiento y, con la llegada de la democracia, desaparecieron definitivamente.

En 1995  se reestructuró para la Universidad de Barcelona, en el edificio de Levante se encuentra la biblioteca, en el Central (hoy del mediodía/migdia) la facultad de Pedagogía y La facultad de formación de profesorado, en el de Poniente la facultad de Psicología y sus departamentos.



Epílogo

El campo de concentración de Horta y otros veinte en Cataluña y los del resto del estado español estaban inspirados en los campos de concentración alemanes habilitados por el régimen nazi a los pocos meses de subir al poder Adolf Hitler. Algunos historiadores han señalado a Paul Winzer, jefe de la Gestapo en España y durante un tiempo comandante del campo de concentración de Miranda de Ebro, como el arquitecto de los campos de concentración franquistas. La función de estos campos era la de disponer de mano de obra esclava para construir obras civiles (presas de embalses, canales, líneas de ferrocarril o aeropuertos); retener, investigar, clasificar por responsabilidades, adoctrinar a los prisioneros; y fusilar a aquellos que  consideraban"irrecuperables".
296 campos de concentración en toda España, esa es la cifra que está documentada. En realidad se trata de un número superior ya que algunos de estos eran, complejos concentracionarios formados por varios campos (como Auschwitz-Birkenau, que comprendía los campos de:Auschwitz I, campo original. Auschwitz II-Birkenau, campo de concentración y exterminio. Auschwitz III-Monowitz, campo de trabajo para la IG Farben (Bayer), y 45 campos satélites más). Es el caso de la ciudad de León en la que se estableció un campo central en el monumental Hostal de San Marcos y otros tres de menor tamaño en el Hospicio, el Colegio Ponce y de Santa Ana. Algo similar ocurrió en Alicante, Guadalajara, Irún, Cáceres, Cartagena, Pamplona, Murcia y también en Bilbao, donde el campo principal se abrió en la Universidad de Deusto, del que dependían los prisioneros encerrados en la plaza de toros de Vistalegre y en la Escuelas del Patronato de San Vicente de Paúl. 
Entre 700.000 y un millón de españoles pasaron por los campos de concentración franquistas. Los propios informes del Ejército indican que solo en abril de 1939 había un mínimo de 500.000 hombres y mujeres encerrados en campos.

jueves, 9 de enero de 2020

La curva de las monjas

El revolt de les monges


La casa de la calle Trafalgar, en Barcelona fue fundada en el año 1909, al alquilar las Dominicas de la Anunciata los pisos principal y primero en el número 50/52, para trasladar allí la Comunidad, colegio y la residencia de ancianos.



Al estallar la guerra el 18 de julio de 1936, la Priora, Hna. Ramona Fossas, estaba convencida de que no corrían gran peligro, ya que el Colegio se había adaptado a las Mutuas Escolarizadas.

Hasta el día 24 vivieron con relativa tranquilidad y pudieron continuar con sus cosas. Pero vieron que las cosas se ponían cada día peor, y el clero tenía que refugiarse en lugares seguros.

Durante los días 24 y 25 de julio, la mayoría de las Hermanas, vestidas de seglar, se dispersaron en casas de familias amigas, quedando apenas seis religiosas en el piso principal y cuatro en el primero. Vestidas también de seglar como las "señoras pensionistas" que estaban en la casa, creyeron poder pasar inadvertidas
El lunes 27, hacia las 9 de la mañana, llegó un grupo de milicianos armados de la CNT-FAI, que registraron los dos pisos buscando objetos de valor.

Se marcharon diciendo "que ya volverían"; por la tarde, hacia las 15:00, sonó el timbre. Al asomarse a la puerta para ver lo que pasaba vieron la escalera llena de milicianos armados. Estos entraron en las instalaciones sin muchas consideraciones, y para hacer el registro más a sus anchas encerraron a las Hermanas en una habitación. Después de haberlo saqueado, las sometieron a un interrogatorio al que respondió con calma la Hna. Fossas.

Les hicieron presentar la cédula y el carnet del sindicato, como no lo tenían comenzaron a dudar de quienes eran en realidad. Las sospechas se confirmaron al oír a una de ellas tratar a la Hna Fossas de «Madre». Entonces una miliciana comentó: «Vaya madre con tantas hijas». Y un miliciano añadió: «¿Veis como son monjas?». A esto se sumó la acusación de una mujer que se prestó a señalar quienes eran las religiosas y quienes las seglares.

Reconocidas como monjas la Hnas. Ramona Fossas, Adelfa Soro, Teresa Prats, Otilia Alonso y Ramona Perramón . Las hicieron bajar; las empujaron al interior de un camión y las condujeron de un comité a otro, sometiéndolas a las burlas y escarnios de cuantos presenciaron con alegría su detención. Ellas, se mantuvieron firmes. Llevadas a una “Cheka” que pertenecía a la CNT-FAI en la calle Bonavista, del barrio de Gracia, las encerraron nuevamente.
Una checa o cheka era una instalación que durante la guerra civil española fue utilizada en la zona republicana al margen de las leyes para detener, interrogar, torturar, juzgar de forma sumarísima y asesinar a sospechosos de simpatizar con el bando franquista. Las checas fueron utilizadas principalmente por algunas personas o grupos relacionados con partidos y sindicatos que operaban en la zona republicana.El nombre procedía de la primera policía política soviética creada en Rusia el año 1917. CHEKA es la sigla rusa de Comisión Extraordinaria Panrusa para la supresión de la contrarrevolución y del sabotaje, precursora de la OGPV, NKVD y KGB.
Convencidas de lo que les esperaba, la Hna. Fossas, las exhortaba para que permanecieran  valientes y serenas hasta el final. En esta prisión los milicianos las sometieron a un duro interrogatorio para que abandonasen su estado religioso

Entrada ya la noche, dijeron a las religiosas: «Vemos que realmente persisten ustedes en continuar siendo monjas; pues bien, las devolveremos a su convento como desean. Suban al camión que las llevará a su casa». 

Ellas subieron, pero al ver que el camión se dirigía hacia otra dirección, percibieron la inminencia de su fin.
El camión fue ascendiendo hacia la cumbre del Tibidabo; tomó allí la dirección de Vallvidrera y al llegar a la curva , hoy denominada «Revolt de les Monges»- en la zona de «el Fero», se detuvieron. Entonces, una miliciana que iba con ellos dijo: «Llevamos mucho polvo y aquí tenemos que dejarlo».


Mandaron bajar a las Hermanas, una tras otra y según ponían el pie en el suelo, les disparaban en la cabeza. Habían muerto las Hnas. Ramona Fossas, Adelfa Soro y Teresa Prats,

Ramona Fossas (54 años)

 Adelfa Soro (49 años)

 Teresa Prats (41 años)

En ese momento la miliciana dijo «A las jóvenes no hay que tirarles a la cabeza, sino al vientre, para que sepan lo que es padecer»
Y así lo hizo, disparando ella misma contra las Hnas. Otilia Alonso y Ramona Perramón que quedaron malheridas.

Otilia Alonso (19 años)

 Ramona Perramon (37 años)

Los disparos alertaron a una familia de panaderos de Vallvidrera que se acercaron a auxiliar a la víctimas.Las llevaron a una casa habilitada como hospital provisional por la Cruz Roja. cuyo nombre oficial era Hospital n.16. A cargo del medico de Vallvidrera, Dr. Esteve Serra Terradas.

La Hna. Otilia solo vivió unas dos horas, habló algo con ellos, les dijo el nombre y la dirección de su familia para que les escribieran.
La Hna. Perramón, gracias a la asistencia medica fue reanimándose y dio cuenta detallada de los hechos. Intentaron sin resultado salvarle la vida. Murió en la tarde del 28 de julio.

Sus cadáveres, recogidos por una ambulancia del Hospital Clínico, fueron identificados por el médico de la comunidad de la calle Trafalgar, D. Luis Fortuny Navarro, fotografiados e inscritos en el Libro de Registro del Depósito Judicial de Barcelona donde permanecieron algunos días, al no ser reclamados por nadie fueron enterrados en la fosa común del cementerio del Sud Oeste (cementerio de Montjuic) el cadáver de la Hna Perramón fue llevado a la sepultura desde el Hospital de la Cruz Roja.

Las fotografías de los cadáveres de las Hnas: Ramona Fossas, Adela Soro, Teresa Prats y Otilia Alonso se conservan y veneran en la Congregación.
En el lugar de la ejecución, las Dominicas de la Anunciata, hizo levantar en 1958 un monumento en su recuerdo. Se trata de una Cruz románica de piedra sobre base piramidal a la que se asciende por cinco gradas (hoy en día enterradas) y en la que se leen los nombres de las cinco Hnas de la calle de Trafalgar.



Curiosamente, en esta curva se  han registrado durante algunos años las temperaturas más frías de Barcelona pudiendo llegar a 7 u 8 bajo cero.